Ahora con mi Blog creado en Blogger decidí nuevamente publicar mi entrada que solamente tenia en Google+.
In fértil ¿Olvidada por Dios?
Es difícil pensar que la in fertilidad sea algo justo, pareciera ser como una
mala jugada del destino, de la vida, que se yo. A veces podemos hasta llegar a
pensar que las mujeres in fértiles somos olvidadas por Dios.Desde niña he asistido a la iglesia y me ha gustado conocer y experimentar del
amor de Dios y en esta etapa de in fertilidad no ha sido la excepción.
Quisiera
compartir algunos pasajes de relatos Bíblicos acerca de la in fertilidad, con la
finalidad de saber que no estamos solas en esta lucha y que esta experiencia se
puede transformar en una bendición.
En la Biblia por antiguo que parezca, habla de muchos temas que el ser humano
afronta y uno de ellos es la in fertilidad, para mí ha resultado reconfortante
estudiar estos pasajes y es por esto que me atrevo a compartirlos
esperando que puedan ser de aliento a más personas que viven una situación
parecida a la mía.
Sin más preámbulos quiero iniciar este recuento bíblico de in fertilidad y
titularlo:
“Tu descendencia será como las estrellas del cielo” (Génesis 15:5) 3 Generaciones de in fertilidad
Abraham y Sara
¿Acaso hay algo Imposible para Dios? Génesis 18:14
Uno de los personajes más representativos de la Biblia es Abraham mejor
conocido como el padre de la Fé, no crean que Abraham empezó siendo el hombre
con más fe del planeta, pero ese no es el tema de hoy; La esposa de Abram
se llamaba Saraí, ellos no podían tener hijos, así que Dios le prometió a Abram
que su descendencia sería tan grande como las estrella del cielo.
Dios le dijo a
Arbam (Génesis 15:5-7):
“Mira el cielo y cuenta las estrellas, así de numerosa será tu descendencia!”.
Y Abram creyó al Señor y el Señor lo reconoció como justo.
Más adelante Dios cambia el nombre de Abram por Abraham y esta es la razón:
(Génesis 17:4-6)
Este es el pacto que establezco contigo:
Tú serás el padre de una multitud de
naciones.
Ya no te llamarás Abram,
sino que ahora en adelante tu nombre
será Abraham,
porque te he confirmado como padre de una multitud de
naciones.
También le dijo Dios a Abraham:
(Génesis 15:15)
A Saraí, tú esposa, ya no llamarás Saraí, sino que su nombre será Sara.
Yo la
bendeciré y por medio de ella te daré un hijo.
Tanto la bendeciré, que será
madre de naciones,
y de ella surgirán reyes de pueblos.
Entonces Abraham
inclinó su rostro hasta el suelo
y se rio al pensar ¿acaso puede un hombre
tener
un hijo a los cien años y ser madre Sara a los noventa?...
Sara tu esposa, te dará un hijo al que llamarás Isaac, Yo estableceré mi pacto
con él y con sus descendientes, como pacto perpetuo.
Más adelante en la historia a Abraham lo visitan 3 hombres, no relatan mucho
acerca de ellos pero pudiera tratarse Dios y de ángeles, aqui les cuento lo que la Biblia dice acerca de la visita:
(Génesis 18:10-15)
¿Dónde está Sara tu esposa? Allí en la carpa les respondió,
Dentro de un año
volveré a verte- dijo uno de ellos,
y para ese entonces tu esposa Sara tendrá
un hijo.
Sara estaba escuchado a la entrada de la carpa,
a espaldas del que
hablaba.
Abraham y Sara eran ya bastante ancianos,
y Sara ya había dejado de
menstruar.
Por eso Sara se rio y pensó:
¿acaso voy a tener este placer ahora
que ya estoy consumida
y mi esposo tan viejo? .
Pero el Señor le dijo a Abraham:
¿Por qué se ríe Sara? ¿No cree que podrá tener hijo en su vejez?
¿Acaso
hay algo imposible para el Señor?
El año que viene volveré a visitarte en esta
fecha,
y para ese entonces Sara habrá tenido un hijo.
Sara, por su parte tuvo miedo y mintió al decirle:
Yo no me estaba riendo. Pero el Señor le replicó: Sí te reíste.
¿Cuantas veces nos hemos sentido como Sara? Incrédulas, sin fé, cuantas veces
lloramos, por creer que cada día que pasa la posibilidad de tener un hijo se
aleja, o quizás la sentimos cerca y cuando parece completarse se aleja
nuevamente. La confianza de Sara estaba en lo que su lógica le dictaba, no en el
poder infinito de Dios.
En la biblia he encontrado muchos sentimientos humanos, eso hace que me
sienta identificada, y no me reproche de repente por dudar o que me falte
fe, sin embargo busco no quedarme estancada en este episodio, le pido a Dios
avanzar y continuar con mi vida y recobrar fuerzas y tener un a fe
renovada.
Aun y cuando Sara inicialmente no creía, la promesa se cumplió.
(Génesis 21:1-7)
Tal y como el Señor lo había dicho,
se ocupó de Sara
y cumplió
la promesa que le había hecho.
Sara quedo embarazada y
le dio un hijo a Abraham
en su vejez.
Esto sucedió en el tiempo anunciado por Dios.
Al hijo que Sara le
dio,
Abraham le puso por nombre Isaac…
Sara Dijo entonces:
Dios me ha hecho
reír,
y todos lo que se enteren de que he tenido un hijo se reirán conmigo.
Definitivamente, los tiempos de Dios son perfectos y aun en nuestra
desesperación de querer tener las cosas en NUESTROS TIEMPOS, Él se muestra
paciente para con nosotros.
Bueno ya hablé de la primera generación, ahora vamos por la segunda. Como
relate en la historia ellos tuvieron un hijo llamado Isaac, así que les
contaré un poco de él.
Isaac y Raquel
Isaac Oró al Señor en favor de su esposa, porque era
estéril.
El señor oyó su oración y ella quedo embarazada.
Génesis 25:19-21,
Como Isaac lo tuvieron ya un poco mayorcitos Sara y Abraham, la mamá de Isaac
falleció sin que antes él se casara, en aquel tiempo la costumbre era que los
padres le escogían la esposa, el caso es que Abraham quería que Isaac se casara
con alguien de la tierra de donde Abraham había nacido, así que le pide a su
siervo que vaya allá y traiga a una mujer para que fuese la esposa de Isaac
(Génesis 24).
El caso es que el siervo tenía miedo de jurarle encontrar esposa a Isaac, que tal si hacia el viaje hasta allá y si ¿la muchacha NO quisiera venir?, así que Abraham le dijo que si la mujer que había escogido no
quería venir lo liberaba del juramento, emprendió el siervo el viaje y
llego a la ciudad y el siervo oro:
Señor, Dios de mi amo Abraham,
te ruego que hoy me vaya bien,
y que demuestres
el amor que le tienes a mi amo.
Aquí me tienes, a la espera junto a la fuente,
mientras las jóvenes vienen a sacar agua.
Permite que la joven a quien le diga:
“Por favor,
baje usted su cántaro para que tome yo un poco de agua,
y que me
conteste:
Tóme usted,
y además le daré agua a sus camellos,
sea la que tu
elegiste para tu siervo Isaac,
así estaré seguro del amor que tienes a mi
amo.
El relato dice que no había terminado de orar, cuando vio que se acercaba
Rebeca, la joven era muy hermosa, así que el siervo ni tardo ni perezoso, le
pide el agua para beber y ella amablemente contesta: “Beba usted y daré de
beber a sus camellos”.
El relato narra que el padre de Rebeca era un pariente lejana de Abraham y
hospedan en su casa, el siervo habla con los padres de la joven y ella
acepta a ir con el siervo para ser esposa de Isaac. Partieron al día siguiente
de regreso a casa de Abraham e Isaac, quienes al verse se amaron.
Trate de resumir el capítulo 24 de Génesis quien cuenta a detalle toda la
historia (67 versículos).
Murió Abraham sin conocer los hijos de Isaac, la Biblia dice que la esposa de Isaac (Rebeca) era
estéril.
(Génesis 25:19-21):
Isaac Oró al Señor en favor de su esposa,
porque era
estéril.
El señor oyó su oración
y ella quedo embarazada…
(Génesis 25:24)
Cuando le llegó el momento de dar a luz,
resulto que en su seno había mellizos.
Nuevamente Dios cumplió su promesa, el escogió a Rebeca para Isaac sin importar
que fuese estéril y le dio 2 hermosos hijos a quienes llamaron Esaú y Jacob.
Jacob y Raquel
Yo estoy contigo. Te protegeré por donde quiera que vayas, te
traeré e vuelta a esta tierra. No te abandonaré hasta cumplir con todo lo que
te he prometido. (Génesis 28:15)
En aquellos tiempos la herencia siempre se la daban al primogénito y al segundo
solo el padre le daba una bendición, así que hubo un dilema entre los hermanos
como eran mellizos, pero esa es otra historia… el punto es que crecieron
Jacob y Esaú y les llego el momento de escoger esposa, así que le dijo
Isaac a Jacob que no se casara con una Cananea (lugar donde vivían) por lo
tanto Jacob se fue a otro lugar llamado Berseba y se encaminó a Jaran. En la
noche se quedó dormido y tuvo un sueño muy interesante:
(Génesis 28:13)
En el sueño,
el Señor estaba de pie junto a él y le decía:
Yo
soy el Señor, el Dios de tu abuelo Abraham
y de tu padre Isaac.
A ti y a tu
descendencia les daré la tierra en la que estas acostado.
Tu descendencia será
tan numerosa como el polvo de la tierra….
(Génesis 28:15)
Yo estoy contigo.
Te protegeré por donde quiera que vayas,
te
traeré e vuelta a esta tierra.
No te abandonaré
hasta cumplir con todo lo que
te he prometido.
Llego Jacob a Jarán y allí se encuentra con un pariente llamado Labán
(era su tío), Laban tenía 2 hijas Lea y Raquel. Al mes de estar allí con
Laban. Laban le propone trabajar a Jacob para el, èl le contesta que trabajaría
7 años a cambio de poderse casar con Raquel de quien se había enamorado. El
caso es que Jacob trabajo 7 años para Laban y el día de nupcias, Labán
le da por esposa a Lea (hermana mayor de Raquel, según la costumbre las
mujeres mayores se casaban primero), Labán no cumplió con lo pactado e
hizo trabajar a Jacob 7 años más y ahora si le dieron por fin en matrimonio a
su amada Raquel. En aquellos tiempos la costumbre era tener más de 1 esposa,
ahora eso no es posible en la mayoría de las culturas y siendo honestas yo así
lo prefiero.
Estas hermanas sufrieron muchísimo a tener que compartir marido, y lo
triste de la situación es que Jacob no amaba a Lea como a Raquel, el caso que
este conflicto se hizo muy fuerte entre las hermanas, también porque Lea podía
tener hijos y Raquel no. El caso es que Lea se burlaba mucho de Raquel
por no tener hijos y la situación la tenía bastante frustrada, aun y cuando ella
era la esposa amada, el amor no parecía ser suficiente y un día
desesperada le dice a Jacob:
(Génesis 30: 1-2)
Pero viendo Raquel que ella no daba hijos a Jacob,
tuvo celos
de su hermana,
y dijo a Jacob:
Dame hijos, o si no,
me muero.
Entonces se
encendió la ira de Jacob contra Raquel,
y dijo: ¿Estoy yo en lugar de Dios,
que
te ha negado el fruto de tu vientre?.
Dios escucha las suplicas de Raquel a quien le concede tener un hijo y llama
Jose:
(Génesis 30:24)
Entonces Dios se acordó de Raquel;
y Dios la escuchó y le
concedió hijos.
Y ella concibió y dio a luz un hijo, y dijo:
Dios ha quitado mi
afrenta.
Y le puso por nombre José,
diciendo: Que el SEÑOR me añada otro hijo.
Y si, después de Jose tuvo otro hijo. Y sobra decir que el hijo favorito de
Jacob era José. Quien más a delante sería gobernador en Egipto y salvaría al
pueblo de Israel de una terrible hambruna, pero esa es otra historia (muy
emotiva por cierto).
Y bueno aquí se acaba la primera parte de Infértiles ¿olvidadas por Dios?,
quizás estas historias son antiguas y hay costumbres que en la actualidad no
son tolerables, aún así, el punto no es ese, el punto es que reflejan sentimientos muy actuales y muy reales acerca de lo que vive una mujer con
in fertilidad.
Es normal que a veces nos falte fe y creamos que ya no es
posible tener un hijo con nuestra situación tan complicada, como fue el caso de
Sara ó que quizás tengamos celos al ver como otras personas pueden tener hijos
y entremos en la desesperación como el caso de Raquel, que ve a todo mundo
tener hijos menos ella.
Son sentimientos humanamente normales y no por eso Dios
dejará de amarnos y no por eso dejará de cumplir sus promesas en nuestra
vida y escuchar nuestras oraciones. El punto es no quedarte estancado en estos
sentimientos y continúes.
Oremos pues como Isaac y como Raquel su nuera, tengamos fe como
Abraham, sintamos la confianza que tuvo Jacob.
¿Acaso hay algo Imposible para Dios?
Génesis 18:14.
Y como le dijo a Jacob:
(Génesis 28:15) Yo estoy contigo. Te protegeré por donde quiera que vayas… No
te abandonaré hasta cumplir con todo lo que te he prometido.
Y quisiera terminar esto con este texto que leí ahorita estaba buscando una
imagen para el post y me encontré con estas hermosas palabras de aliento del
blog Mana-Ebebezer:
Si tú has sentido que las fuerzas flaquean,
que es ya es muy difícil seguir
creyendo y esperando,
si te has sentido olvidado por Dios,
que no ha escuchado
tus oraciones,
es más inclusive
que ya ni siquiera vez como opción seguir
orando
y pidiendo por ello,
hoy debes saber que así se encontraba Raquel
y Dios
en su maravillosa e infinita misericordia se acordó de su aflicción,
se acordó
de su anhelo, la escucho y la bendijo,
le concedió tener hijos, le concedió
aquel anhelo,
hoy Dios te habla a ti
y te recuerda que no se olvidó de lo que
le pediste,
te dice que ha escuchado cada una de tus oraciones
y así como a
Raquel te concederá tu sueño,
ese que Él mismo ha estado fabricando
especialmente para ti,
te lo da eso por lo que has llorado tanto,
que aunque
lejano se vea,
Dios espero este momento para dártelo,
que aunque te sientas
olvidado,
que aún que hasta puede que te quieras dar por vencido
y dejar tu
sueño en el olvido
porque no vez que Dios haga nada para cambiar esa situación,
pero hoy hay buenas nuevas para ti,
Dios no olvido tu petición
y mucho menos a
ti, de cerca vio todo tu sufrir,
tu espera, la agonía de ver frustrados tus
sueños una y otra vez,
ha escuchado todo lo que le has dicho en este tiempo
y
ha visto con alegría que sigues esperando,
que sigues creyendo en Él
y sobre
todo recuerda que
Él mismo fue quien puso ese sueño en tu corazón,
Él no ha
olvidado nada,
ni te ha dejado por ningún momento,
tu espera y entrega ahora
son recompensadas
“porque Yo se los pensamientos que tengo acerca de vosotros,
dice Jehová pensamientos de paz y no de mal para daros el fin que esperáis…”
Has conmovido el corazón de Dios y te da lo esperado,
“yo conozco tus obras he
aquí he puesto delante de ti
una puerta abierta la cual nadie puede cerrar
por
que aunque tengas poca fuerza haz guardado mi palabra
y no has negado mi nombre…”
No desmayes que la recompensa viene ya, que Dios te concederá lo que esperas.
“Dios no olvida”.
HOLAAA CARO
ResponderBorrarDesde que la publicaste en google + me gusto...
tiene toda la razón, nunca hay que perder la fe por que los tiempo de Dios son perfectos.
Si Tayra :), Los tiempos de Dios son perfectos. Un abrazo guapa que bueno que te haya gustado la entrada, yo cuando la re-leo me animo también.
ResponderBorrarBonita historia, me encantó!!! No perdamos la fe cuando el decida que es el mejor momento para nosotros, serán recibidos con amor !! Con la misma ilusión, yo decía antes que quería ante de los treinta pero no es cuando yo lo quiera, ya lo entiendo, dios manda en mi!
ResponderBorrarYo también pensaba muchas cosas antes, pero ahora pienso diferente, los tiempos de Dios son perfectos. Te mando un abrazo.
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